¡Qué fea estás con fores!

Ya estoy en Berlin, donde... tatatachán... también llueve!!! Es como si yo fuera un dibujo animado y tuviera una nube negra sobre mi cabeza que me persigue allí donde vaya.

Hice el viaje de Hamm a Berlin en un ICE (tren rápido) y fue bastante bien, teniendo en cuenta que el alemán tuvo que subir a colocarme la maleta porque pesaba algo más de una tonelada.

En el viaje tuve presentimientos de muerte, no porque fuéramos a una velocidad de 25o k/h, que en el tren no te enteras. El problema fue que en una de las paradas se sentó a mi lado una moza y en cuanto pasó el revisor, se levantó y se fue huyendo de el y dejo abandonada una bolsa a mi lado. Yo pensé que estaba escondida en el baño esperando a que el revisor pasara, pero después de media hora sin dar señales de vida empecé a mirar a la bolsa y a pensar que tendría dentro. Se podía ver un rollo de papel de regalo. Envolvería un islamista radical una bomba en papel de regalo?- pensé. Y mientras pensaba como podía decirle al revisor que una chica se había dejado allí una bolsa, para lo que necesité más o menos otra media hora (sin tener muy claro como decirlo) apareció la chica que cogió la bolsa y volvió a desaparecer. Y yo me quedé muy tranquila pensando que si estallaba la "bomba" no sería mi responsabilidad haber dado el aviso de que allí había un objeto sospechoso. Qué escurridiza es la culpa!

Ya en Berlín, inauguré mi estancia cenando en el Tailandés, porque mi hermana sigue obsesionada con la salsa de crema de cacahuete.

Uy, acabo de darme cuenta de cual es el título que escribí para esta entrada y nada de lo anteriormente redactado tiene nada que ver.

Antes de ayer acabé dos libros. Por un lado terminé 1984, que me llevó bastante tiempo (lo leí en inglés) pero que me gustó. Y acabé también mi primer libro en alemán. Es un libro para niños, pero tiene mucho texto y un montón de vocabulario que yo no conocía. Menos mal que tuve al alemán a mi lado haciendo de traductor simultáneo cuando yo me atascaba. El libro se llama Wie Schön ist Panama y es de Janosch. Trata de un tigre y un oso que van a buscar Panamá porque allí huele a plátano y todo es más bonito. El libro es muy divertido. Si alguno de los que me leen tienen hijos pequeños, sobrinos (reales o postizos) o algo por el estilo, se lo recomiendo. Otro día os haré otras recomendaciones de literatura infantil, para la de adultos, ya están mis hermanos.