miércoles, 9 de enero de 2008

Perdido como un quinto en día de permiso

Así estuve yo ayer al bajarme del autobús. Para ir a clase de alemán cogí un autobús que no es el que cojo habitualmente pero que también me deja cerca. El problema es que estaban los cristales empañados y cuando bajé, como el autobús va haciendo una especie de zigzag, no sabía muy bien dónde estaba el norte. Tuve que caminar un poco hasta encontrar algún punto de referencia.

Me sentí muy rara, perdida tan cerca de un sitio al que voy 3 veces por semana, sin saber hacia dónde está el mar, que es el punto cardinal principal de esta ciudad. Incluso me sentí un poco mareada.

Comentarios:
ah, creo que se que bus cogiste y por donde te paraste porque ya me paso a mi alguna vez, hermana.
 
Es muy surrealista, esto de perderse al bajar de un autobus y de sentirse mareada. Que misterioso...
 
Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]





<< Inicio

This page is powered by Blogger. Isn't yours?

Suscribirse a Entradas [Atom]