¡Qué fea estás con fores!

Ha venido un chico a arreglar el agua caliente y llegó a las 7 de la mañana. Mi alemán a esas horas y recién levantada es malísimo, pero el del tipo, que habla berlinés profundo, es aún peor. Y como yo soy incapaz de levantarme, abrir la puerta y volver para la cama, me he dado un buen madrugón, hoy lunes que no tengo que trabajar. Así que aprovecharé el día para hacer los deberes de alemán, la compra y correr un poco.

Ayer fui al teatro y como la otra vez no, me enteré de mucho, pero me gustó. Era una obra en la que seis mujeres jóvenes (de mi edad), tres de la Alemanía del Este y tres del Oeste, hablaban de lo que significa ser mujer, el amor, la relación con sus padres... la vida, en definitiva. La puesta en escena era muy simple, solo tres mesas y seis sillas, unos libros y un tocadiscos. Es pena que no se pudiera comprar el texto porque me quedé con las ganas de entender mucho más.